Vuelven los errores palomeros

Pobre blog, lo he tenido un poco abandonado por el inicio del curso, ya por fin te retomo con más errores de aquellos palomos con ganas de conquistar o copular (depende del palomo). Refrescaré la memoria para quién haya tenido la pésima suerte de no posar sus retinas en la entrada Un Cortejo Complicado.

Los errores palomeros pueden describirse como las más nefastas tácticas de cortejo, que por algún error o cruce de cables en el sistema mental masculino son utilizadas con mucha asiduidad, más de las que nos gustaría a nosotras.

Error Palomero Cortejador número 4: Te mando a otro palomo
Parece que ser del mismo sexo no os ayuda a reconocer el instinto y la naturaleza por la que os movéis. Un enamorado hace todo lo posible por cortejar a su dama, como ve que por sus tácticas no es capaz de conseguir algo más allá que una "bonita" amistad, decides agregar al juego a un secuaz. Inocentemente presentas a tu secuaz a la damisela a cortejar, ya le has dado instrucciones para que mencione delante de ella y como quien no quiere la cosa el día que te peleaste con cinco matones el doble de corpulentos que tú y que a pesar de terminar en el hospital con una mano rota, ellos lo pasaron peor. O quizás hable de el día que entrastéis juntos al baño y no se creía lo que veía. Sin embargo pasan los días y no dice ni palabra de tí apenas, sólo hablan entre ellos, se rién, sin saber cómo sus miradas han pasado de ser normales a ser miradas confidentes... Sí señor, has caído en el error, tu secuaz te ha traicionado y se ha llevado a la chica. Por lo tanto evoco uno de los refranes más sabios, no dejes a los demás lo que puedas hacer por tí mismo.

Error Palomero Cortejador número 5: Intento de Celos
Es cierto que cuando se tiene una sospecha de peso de que la persona en cuestión está interesada en tí pero no da el paso, el intento de celos puede resultar exitoso. Por el contrario, si no se está seguro de nada y sólo existe una amistad o una buena relación el intento de celos puede tener un final trágico. El cortejador siempre atento y halagador con ella conoce pasa sin motivo aparente a ser frío y pasota, y las atenciones tan cuidadas y mil veces pensadas se las realiza a otra especimen. Las reacciones son variopintas, o bien ella se ríe porque sabes lo que estas haciendo (solemos darnos cuenta) y pasa hasta que te canses de melosear con la otra, o bien se presta a ayudarte a conquistarla dándote prácticos consejos que con ella con funcionarían.

Error Palomero Cortejador número 6: Ser borde
Suele usarse cuando el palomo ya lo ha intentado todo ya ella tiene claro que es lo que pretende. Una crisis de doble personalidad a lo Jekyll y Mr. Hide se apodera de nuestro entrañable hombre y se convierte en un ser malévolo que insultará y criticará a cada momento, gestos chulescos y vacilones sustituirán a aquellos pánfidos y melosos con la esperanza de que ese cambio a chico duro haga reaccionar a la mermada cortejada. NO, y lo pongo con mayúsculas, no se os ocurra, siempre que ocurre esa transformación pensamos que sois imbéciles y que la máscara de amabilidad era sólo para conseguir un revolcón, y cómo no lo habéis conseguido pensáis vengaros de esa forma tan inmadura.

Espero que os sirva de algo a aquellos que anden algo perdidos por la vida del cortejo, los errores palomeros cortejadores siempre seguirán su curso, porque sin ellos no seríamos nada y este Blog menos aún.